NUEVA YORK, EU.- “¡Mi casa se está inundando!”, fue lo
primero que exclamó Thalía el día de ayer al ver como poco a
poco la alfombra de su casa se humedecía.
Entre gritos de sorpresa y groserías en inglés, la cantante
mexicana, que vive en Nueva York, fue revisando los cuartos
de su hogar que comenzaban a verse afectados por las
fuertes tormentas que se registraron en la zona a causa del
huracán “Ida”.
Uno de los espacios involucrados fue su gimnasio personal,
lugar donde Thalía empezó a notar que tenía múltiples cables
conectados a la electricidad.
Ante el preocupante escenario, la cantante de “Regresa a mí”
optó por reírse de la situación.
“Les juro que me da risa, me da risa de ‘fucking’ angustia”,
declaró antes de notar cómo el agua comenzaba a subir de
nivel.
Debido a que los cables ya comenzaban a verse involucrados
con el agua, la mexicana instruyó en inglés a sus hijos que
fueran cuidadosos.
La también actriz fue documentando en sus historias de
Instagram cómo iba progresando la inundación en su estudio
de grabación con pantalla verde, donde pese al riesgo intentó
levantar los enchufes y cables que ya habían estado en
contacto con el agua.
“¡No ‘fucking’ mamen, mi casa!”, gritó una y otra vez Thalía,
sin embargo, el sentido del humor de la cantante siguió
intacto, ya que posó con un filtro de hada y declaró “en vez de
llorar, volar”.
La también actriz mostró disposición por no empeorar el
problema, porque no había nada que hacer ente el diluvio que
cayó en la zona donde vive.
Lo que inició como un encharcamiento, pronto evolucionó y
alcanzó el nivel de un escalón. “No pasa nada”, comentó la
mexicana y bromeó con sacar un kayak y múltiples
referencias a la película “Titanic”.
Thalía ya se encuentra a salvo en otro lugar que se aprecia
como una granja y declara que todo el día ha estado
trabajando.