San Miguel de Allende.— Vestidos de blanco y en un ambiente de recogimiento, familias del Infonavit Malanquín y de colonias vecinas participaron este domingo en una caminata y misa por la paz, convocada por el obispo de la Diócesis de Celaya, Víctor Alejandro Aguilar Ledesma.
La jornada inició con una caminata en la que los asistentes rezaron junto al obispo, antes incluso de su llegada, como signo de unión y esperanza. Entre los presentes estuvieron familiares de las víctimas del ataque registrado la madrugada del domingo donde fallecieron 3 personas y 17 resultaron heridas. También estuvieron vecinos que se sumaron para pedir por la tranquilidad de la ciudad.
Durante la homilía, el obispo Aguilar Ledesma hizo un llamado a la unidad y a convertirse en generadores de paz desde la vida cotidiana. Invitó a los fieles a ganarse el dinero de manera honrada, a no aprovecharse de las tragedias, a aprender de los hechos violentos recientes y a sembrar amor y valores en la educación de los hijos.
“Tenemos que comprometernos como ciudadanos por la paz de nuestro entorno”, expresó el obispo, exhortando a la comunidad a no dejarse vencer por el miedo y a trabajar juntos para reconstruir el tejido social.
Con oraciones, cantos y un mensaje de esperanza, la misa concluyó como un gesto de solidaridad hacia las familias afectadas y un recordatorio del anhelo de los sanmiguelenses por vivir en una ciudad segura y en paz.