Nace el denominado Experimento de Perturbación Controlada Estratosférica (SCoPEX) llevado a cabo por científicos de la Universidad de Harvard y financiado por Bill Gates.
El plan, que el dueño de Microsoft está financiado, llamado SCoPEX se trata de un proyecto de neoingeniería enfocado a avanzar en la comprensión de los aerosoles estratosféricos que podrían ser relevantes para la geoingeniería solar.
Tal y como explican en la página web de esta prestigiosa universidad estadounidense, el elemento principal del experimento es un globo científico que se elevará 20 kilómetros en la atmósfera, distancia a la que, gracias a sus hélices de hidrodeslizador, liberará hasta dos kilogramos de carbonato de calcio para crear una masa de aire perturbado de aproximadamente un kilómetro de largo y cien metros de diámetro.
El carbonato de calcio ha sido elegido por sus propiedades para reflejar la luz solar y porque según los investigadores no resulta tóxico aunque no exista en la estratosfera de forma natural, además, no supone un riesgo en la destrucción del ozono y el calentamiento estratosférico.
La finalidad del proyecto es conseguir reducir los efectos del calentamiento global anulando una parte de los rayos solares gracias al resultado de lanzar carbonato de calcio, en otras palabras pretende ‘tapar’ el Sol.
Los expertos de Harvard explican que la intención es conocer también los riesgos y la eficacia de la geoingeniería solar, conjunto de tecnologías emergentes que podrían manipular el medio ambiente y compensar parcialmente algunos de los impactos del cambio climático.
SCoPEX tiene planeado su primer vuelo de prueba en junio de 2021 en Suecia. Será llevado a cabo por la Corporación Espacial Sueca (SSC) y previsiblemente volará sobre la ciudad de Kiruna, para poder revisar el control horizontal y vertical del globo utilizando el sistema de cabrestante y las hélices, así como los sistemas de energía, datos, navegación y comunicación.