Marisol Suárez Correa, secretaria del Campo del gobierno del estado, comentó que las piñas de agave que quedaron sembradas debido a la baja rentabilidad de los cultivos pueden reincorporarse al terreno como materia orgánica para evitar que se fermenten y causen daños.
En entrevista, explicó que, al estar compuestas por fibras, agua y vegetales, las piñas podrían ser beneficiosas para el suelo si se incorporan correctamente.
Aunque su antecesor, Paulo Bañuelos Rosales, había advertido sobre los posibles daños sanitarios por la descomposición de estos cultivos, Suárez Correa señaló que lo que podría causar problemas es la fermentación, ya que genera gases que podrían afectar la flora y fauna del suelo.
La funcionaria recomendó que los agricultores utilicen herramientas como rastras o picadoras para deshacer las piñas antes de incorporarlas a la tierra.
“Si lo incorporan bien a la tierra, es materia orgánica, es un vegetal de fibras, agua y materia orgánica, entonces, si se incorpora bien a la tierra, no tendría por qué causar problemas”, señaló la funcionaria.
La secretaria del Campo del gobierno estatal indicó que, si los agricultores siguen los pasos adecuados para reincorporar las piñas, éstas podrán descomponerse con el tiempo y convertirse en una fuente de materia orgánica útil para el terreno de siembra.
“Pero, más bien, si lo incorporan, se tiene que podrir, descomponer, es materia viva que le sirve al suelo”, finalizó.