LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- El cantante de regional mexicano Gerardo Ortiz no pisará la cárcel tras enfrentar cargos en Estados Unidos relacionados con presentaciones vinculadas a una empresa señalada por presuntos vínculos con el crimen organizado. Unacorte federal confirmó que el artista fue sentenciado a tres años de libertad supervisada, luego de llegar a un acuerdo con la fiscalía y colaborar con las autoridades estadounidenses.
La resolución fue dictada por la jueza Maame Ewusi Frimpong, quien determinó que la cooperación del cantante con el FBI fue clave para otorgarle una sentencia sin reclusión. Ortiz se declaró culpable en el proceso, pero su colaboración —incluido su testimonio en contra de su exmánager, Ángel del Villar, investigado por violaciones a la Ley Kingpin— permitió que recibiera un castigo menor.
De acuerdo con documentos judiciales, Ortiz reconoció haber realizado presentaciones organizadas por Gallística Diamante, empresa señalada por sus presuntos vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Como parte del acuerdo legal, el cantante también deberá pagar una multa de 1.5 millones de dólares.
Durante los próximos tres años, Ortiz estará obligado a cumplir diversas condiciones, entre ellas presentarse periódicamente ante un oficial de supervisión, evitar cualquier relación con actividades ilícitas y cumplir con programas designados por la corte.
La sentencia ha generado reacciones mixtas entre seguidores y críticos, ya que aunque el artista evita la prisión, el caso ha afectado de manera significativa su imagen pública. Sin embargo, su defensa asegura que Ortiz está listo para cumplir con todas las medidas impuestas y continuar con su carrera musical sin contratiempos legales.
Con esta resolución, el caso queda parcialmente cerrado, mientras las autoridades estadounidenses continúan sus investigaciones en torno a las redes financieras vinculadas al narcotráfico en la industria del entretenimiento.