CDMX.- Se generó como tendencia en Twitter un fuerte rumor que involucra a la cantautora mexicana Ana Gabriel, pues múltiples usuarios destacan el hecho de que aparentemente dedicó una de sus más emblemáticas canciones a Verónica Castro.
La cantante que alcanzara su mayor éxito en los años 80 regresó al centro de la polémica al resaltar que el tema Simplemente amigos, hit de 1988, habría sido inspirado por la famosa actriz y presentadora, quien por aquella época triunfaba en la televisión internacional con melodramas como Los ricos también lloran y Rosa salvaje, y era considerada como una de las bellezas más cautivadoras del medio artístico que conquistaba los corazones de más de uno, y al parecer también de más de una.
Aunque el rumor ya había sido tema de conversación desde hace muchos años, fue la revelación del periodista Jorge Carbajal, quien en su canal de YouTube aseguró que ambas famosas habían sostenido un romance, la causa de que el tema se posicionara de nuevo al centro de la controversia.
Carbajal aseguró que Ana Gabriel deseaba dar a conocer públicamente el noviazgo, sin embargo la negativa de Verónica, quien prefirió conservar su imagen de heroína tradicional de telenovelas, se habría rehusado.
Además afirmó que un maquillista de Ana le confesó que la cantante estaba muy ilusionada con la actriz y presentadora, pero La Vero después le advirtió que no la volvería a ver.
Estas versiones despertaron suspicacias sobre si las letras de las canciones de Ana Gabriel van dedicadas a mujeres, como ya se ha especulado mucho, pues muchos de sus temas hablan de amores escondidos y del deseo de mostrarse tal cual se es. Así reza la letra del tema, cuya dedicatoria se le adjudica a Verónica Castro.
Siempre, como ya es costumbre día a día es igual,
no hay nada que decir, ante la gente es así,
amigos, simplemente amigos y nada más.
Pero quién sabe en realidad lo que sucede entre los dos,
si cada quien al llegar la noche finge un adiós.
Cuánto daría por gritarles nuestro amor,
decirles que al cerrar la puerta nos amamos sin control,
que despertamos abrazados, con ganas de seguir amándonos,
pero es que en realidad no aceptan nuestro amor.
Siempre, con miradas siempre nos damos todo el amor,
hablamos sin hablar, todo es silencio en nuestro andar.