MIAMI, FLORIDA.- Es un hecho que cuando una separación no es gestionada de forma saludable por parte de los padres, puede llegar a repercutir en la salud mental de los niños; como le pasa a Andreas Nicolás, hijo de Paulina Rubio.
El pequeño se encuentra en medio de dos bandos que se disputan su custodia y que incluso están haciendo todo lo posible para evitar que el otro vea al pequeño. Su padre, Nicolás Vallejo “Colate” se ha dedicado también a hacer declaraciones en contra de la exTimbiriche.
Debido a esta estresante situación, el juez que lleva el caso de Paulina Rubio y su exmarido determinó que es necesario que el menor tome terapia psicológica para resarcir el daño del que es víctima.
La Guardiana de la corte familiar de la corte de Miami y el juez Spencer Multack determinaron que Andrea debe llevar un tratamiento paralelo al juicio que sus padres están emprendiendo.
“Cuando empezamos a hablar de la situación de sus papás se puso nervioso, me di cuenta que mintió un poco y no porque no me tenga confianza, sino porque es muy inocente y ama a sus papás. Fue un mecanismo de defensa que utilizó para protegerlos”, determinó la guardiana.
Andrea, hijo de Paulina Rubio se ha enfrentado a estos conflictos desde que es muy pequeño, además de que el dividir su vida entre Miami y España hace su vida mucho más complicada.