La familia Veal mantiene una tradición desde hace seis décadas que es considerada una de las atracciones turísticas principales de Navidad: el Veal Ice Tree, un árbol enorme de hielo.
No se parece en nada a un árbol normal puesto que se crea a partir de mangueras de agua y un marco de madera. El proceso consiste en dejar el agua correr por la noche y que el frío la convierta en hielo.
Todo comenzó en el invierno de 1961, cuando Vierl G. Veal, el fundador de la traidición, estaba rociando una fina niebla de agua para hacer un tobogán de hielo en su estanque.
Durante la noche, un fuerte viento arrojó el chorro sobre unos arbustos de madreselva y los convirtió en esculturas congeladas. A él y a su esposa Mabel les gustó tanto el resultado que decidieron replicar el efecto.
En 1965, se cambió la ubicación del árbol y un marco de madera reemplazó las plantas vivas. El sitio web oficial de Veal Ice Tree afirma que los arbustos utilizados inicialmente tampoco fueron dañados por el hielo.
Vierl falleció en la década de 1970, pero en ese momento el árbol de hielo se había convertido en una atracción local popular, y su familia decidió continuar con la tradición.