IDOMENI, Grecia.- Macedonia reabrió su frontera a migrantes sirios e iraquíes ayer horas después de una protesta pacífica del lado griego de la frontera.
Haider Sahd un funcionario de la ONU en Gevgelija, Macedonia confirmó la apertura en declaraciones.
La policía griega dijo que Macedonia permitiría el ingreso de 300 migrantes. Las autoridades macedonias dijeron que la cifra podría llegar a 350.
Un número similar de migrantes que entraron a Macedonia días antes abordaron un tren en Gevgelija hacia la frontera con Serbia.
Macedonia había cerrado la frontera a todos los migrantes el jueves por la noche, lo que enfureció al gobierno griego.
Por su parte, Macedonia insiste que sólo demoró el flujo de migrantes debido a los cuellos de botella en la ruta de los Balcanes.
En dos actos de protesta ayer 450 migrantes se congregaron junto a la cerca fronteriza con carteles que decían en inglés “abran la frontera” y coreando la misma consigna.
Antes de la apertura unos seis mil migrantes habían ocupado un campamento de carpas durante una noche lluviosa, dijo la policía griega. Otros 500 se encuentran en una gasolinería a 17 kilómetros del lugar.
Aunque las protestas fueron pacíficas algunos migrantes empezaban a perder la paciencia.
Nadie puede detener a los refugiados porque la gente muere en Siria e Irak, dijo Mohamed Kamel de 39 años, un curdo iraquí de Kirkuk que viaja con su esposa y su hija de siete años.
La gente (en el campamento) está hambrienta y furiosa”, agregó Kamel. “Si se prolonga esta situación derribaremos la cerca”.
En Atenas unos 300 manifestantes marcharon hacia la embajada austríaca para exigir que se deje pasar a los refugiados.
Austria ha tomado medidas para demorar el flujo de migrantes desde los países balcánicos, lo que ha tensado sus relaciones con Grecia.
Algunos países utilizados por los migrantes como paso hacia otras naciones de Europa están imponiendo restricciones de paso, provocando un cuello de botella.