Guanajuato, Gto. – Por unanimidad de votos, el Pleno del Congreso local aprobó el dictamen de la iniciativa de Ley de Fomento a la Agricultura Familiar del Estado de Guanajuato, la cual tiene por objeto establecer el marco jurídico conforme al cual el Estado definirá e implementará políticas públicas y estrategias que fomenten la creación, promoción y desarrollo de la agricultura familiar, a partir del reconocimiento de su importancia como modo de vida y actividad productiva que contribuye a la seguridad alimentaria, al uso sostenible de los recursos naturales, la conservación de la biodiversidad, el desarrollo rural y la dinamización de economía del estado.
Finalidades de la ley:
- Procurar el bienestar social y económico de las unidades de producción familiar, reducir la pobreza del sector rural y orientar la acción coordinada de los organismos competentes con un enfoque multisectorial e intergubernamental.
- Contribuir al ejercicio pleno del derecho humano a una alimentación adecuada y suficiente, al desarrollo integral de las personas, familias y comunidades y al sostenimiento de las pautas culturales y recursos naturales de cada región del estado.
- Desarrollar la agricultura familiar a través del uso de conocimientos, tecnología y buenas prácticas, respetando la cultura, las tradiciones y los hábitos de las comunidades agrícolas, contribuyan al crecimiento y desarrollo de las personas y unidades familiares, especialmente de aquellas que se encuentren en situación de vulnerabilidad.
- Fortalecer la producción agrícola familiar rural a partir del derecho al acceso equitativo a todos los recursos naturales y su uso sustentable, respetando los derechos de las comunidades y pueblos indígenas.
- Coadyuvar con la suficiencia autoalimentaría de los núcleos familiares rurales, con el derecho a una efectiva y justa retribución por los excedentes y demás productos que comercialicen.
Al hablar a favor del dictamen, el diputado Paulo Bañuelos Rosales manifestó que para su grupo parlamentario las familias y su bienestar eran una prioridad que tomaban con absoluta seriedad.
En ese sentido, dijo que el desarrollo pleno de las familias era una labor que debían construir en forma integral, perfeccionando las leyes, ampliando el marco jurídico y fortaleciendo el papel de la sociedad y de las instituciones con pasos firmes desde muy distintos aspectos, incluyendo de forma especialmente el de la economía.
El legislador recordó que al iniciar la actual legislatura solo se contaba con la Ley de Aparcería Agrícola y que en al término de la actual se estaría dotando al estado de tres nuevas leyes en materia agroalimentaria.
“Cada una de estas nuevas leyes se sustenta en mejores prácticas nacionales, e internacionales, con la seguridad de que el sector agroalimentario de Guanajuato seguirá creciendo, como lo demuestra cada día, pero ahora respaldados por un marco jurídico de vanguardia que le permita consolidarse como actividad económica primordial de nuestro gran estado”, precisó.
Asimismo, apuntó que la propuesta de nueva Ley de Fomento a la Agricultura Familiar del Estado de Guanajuato estaba diseñada específicamente para fortalecer a ese ámbito fundamental del sector agropecuario y para beneficiar a miles de familias que hoy, a pesar de su trabajo, de su esfuerzo y perseverancia, seguían viviendo en condiciones de vulnerabilidad y que requerían el apoyo de la ley, del gobierno, de la sociedad y de sus comunidades para construir un futuro a la altura de su trabajo y de sus esperanzas.
Bañuelos Rosales argumentó que no solo para esas familias era cuestión de vida el fomento de la agricultura familiar, sino para la población en general porque se estimaba que para el año 2050 la población mundial alcanzará una cifra de 9 mil millones de habitantes, lo que implicará que será necesario duplicar la producción actual de alimentos.
Finalmente, el legislador precisó que la iniciativa era respuesta a las demandas de las personas del campo y que estaban respondiendo a la confianza en ellos depositada.