IRAPUATO, GTO.- El Obispo de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, afirmó que es incomprensible que en México el 90% de la población esté en crisis, miseria y necesidad, mientras solo un pequeñísimo porcentaje tiene de sobra.
Durante su conferencia de prensa, el religioso señaló que el hambre no es una cuestión de falta de alimentos, sino de falta de amor.
Destacó los casos de muerte y desnutrición asociados a esta problemática.
“Es fácil ocultar estas cifras para evitar dificultades, pero debemos cubrir a todas las personas que padecen miseria y hambre”, enfatizó Díaz Díaz.
El obispo subrayó la responsabilidad de la comunidad para contribuir a la resolución del problema de la pobreza y el hambre en el país.
“El problema del hambre y la desnutrición empeora cuando solo se ve como un problema técnico y económico”, señaló.
Enrique Díaz Díaz concluyó que solo se alcanzará una solución si se logra transformar las estructuras sociales, permitiendo que la mayoría participe en la construcción de un sistema fraternal y de una comunidad donde todos puedan ser hijos de Dios.