IRAPUATO, GTO.- El obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, advirtió que la inseguridad y la violencia han provocado la cancelación de fiestas patronales en diversas comunidades, debido a condicionamientos impuestos por grupos del crimen organizado.
Durante su conferencia de prensa dominical, el prelado señaló que la paz y la seguridad deben ser la principal tarea de los gobiernos, ya que actualmente la población vive con temor y bajo presiones que afectan la vida comunitaria y las tradiciones religiosas.
“Y yo creo que las autoridades lo saben, y uno se cuestiona, ¿ya quedamos a merced de estos grupos?, ¿no se puede hacer nada?, nuestras fiestas ya muchas se han suprimido por eso”, expresó.
Explicó que, aunque las celebraciones religiosas se mantienen, la parte social de las fiestas patronales ha sido cancelada en varios lugares, lo que impacta directamente en la convivencia comunitaria y en las tradiciones, especialmente en esta época del año cuando arriban los migrantes.
“La fiesta religiosa sí se hace, pero se ha hecho a un lado la fiesta social, que también tiene mucho sentido de convivencia, más en este fin de año, con la llegada de los migrantes”, señaló.
Enrique Díaz Díaz subrayó que la inseguridad ha rebasado el ámbito de los conflictos cotidianos y se ha convertido en un problema estructural que somete a la población a la voluntad de grupos criminales.
“Entonces, tarea urgente que nos proporcionen seguridad; problemas y pleitos siempre va a haber, pero quedar en manos de la delincuencia es otra cosa, ojalá que sí se pudiera superar esta situación”, concluyó.

