ATENAS, GRECIA.- Al menos diez personas han fallecido a causa de las lluvias torrenciales que han inundado varias localidades de la parte occidental de la región del Ática, en la que se encuentra Atenas.
Una cifra que podría aumentar ya que son varios los desaparecidos tras las fuertes precipitaciones que asolaron la zona este martes por la noche. La gran cantidad de agua caída en apenas unas horas convirtió en ríos de barro las carreteras de Nea Péramos, a unos 30 kilómetros al oeste de la capital.
Las inundaciones han provocado numerosos problemas de tráfico y han dejado atrapados en sus hogares a cientos de griegos. Algunos se han visto obligados a refugiarse en azoteas y balcones a la espera de ser rescatados por los servicios de emergencia.
Algunos residentes se vieron obligados a subir a los tejados y balcones, mientras que los autos eran empujados contra fachadas de viviendas o terminaban volcados por la fuerza del caudal. Doce personas fueron rescatadas de un autobús en un puente.
El primer ministro, Alexis Tsipras, manifestó su pesar por la pérdida de vidas y convocó a una reunión de emergencia con sus ministros.
El gobierno declaró el miércoles el estado de emergencia en la región de Atica occidental, que incluye a Nea Peramos y Mandra.
El martes, declaró estado de emergencia en la isla oriental de Symi, costa afuera de Turquía, después de que una tormenta arrastró a automóviles al mar, dañó casas y provocó un corte de electricidad y suministro de agua.