Irapuato.- Este miércoles, en la audiencia de incidencias del caso Juan David, el menor de 11 años que se encuentra desaparecido en Irapuato, y que presuntamente fue asesinado por su padrastro, Miguel Ángel, un expolicía, se debatió la legalidad de las pruebas que ha presentado la parte ofendida en las investigaciones.
La defensa del imputado ha buscado que algunas pruebas sean desechadas, ya que presuntamente se obtuvieron de manera ilícita, por lo que se estaría violentado el proceso.
Se trata de un celular, que se le aseguró al imputado en una detención previa, en la que además se le hallaron estupefacientes, y el cual, a través de una orden judicial federal fue intervenido para la extracción de información.
También se encuentran entre estas pruebas un pantalón y unos tenis, del expolicía, que fueron asegurados por los agentes investigadores en su casa, con la autorización de Reyna, madre de Juan David y pareja del imputado.
Norma Patricia Barrón, defensa de la familia del menor desaparecido, afirmó que se avanza correctamente, y afirmó que solo es necesario comprobar que todas las pruebas son lícitas.
“Estamos hablando de ministerios públicos con experiencia en poder obtener esos datos de prueba, los están revisando de acuerdo a sus funciones, eso se está viendo, para el caso del teléfono hay una autorización de un juez de control federal y si el juez hubiera percibido un ilícito, lo hubiera rechazado, no hubo oposición del imputado, son autorizaciones que se dieron con firmeza”, afirmó.
Por cuestiones de agenda, la audiencia se reanudará este jueves, y la defensa de la víctima añadió que se estará haciendo todo lo necesario para evitar que, en el juicio, los abogados del imputado pretendan que se preponderen.