Guanajuato.- Desaparecer en el estado es estar en el olvido, aseguraron integrantes del colectivo “Hasta Encontrarte”, en las inmediaciones del Parque Irekua, al dar lectura a su primer informe de actividades.
Al dar lectura al informe, las buscadoras afirmaron que las carpetas de investigación están en el olvido, aunado a que no hay un “sabaneo” de las llamadas telefónicas ni uso de la geolocalización.
Además, aseguraron que tampoco se hace uso de los sistemas de inteligencia del
centro de comunicaciones.
“Al desaparecer un ser querido, muchas veces la única esperanza recae en la investigación por parte de las autoridades encargadas de procurar justicia. Llegamos a poner la denuncia, en donde hemos sido revictimizadas por agentes del Ministerio Público.
“Al momento de denunciar nos dicen que seguro en algo andaba, se fue con el novio, cuando son mujeres desaparecidas, e incluso nos ponen a investigar a nosotras preguntando qué información nueva traemos. Esto viola nuestros derechos”, dijo una mujer.
Karla Martínez, dirigente del colectivo, “Hasta Encontrarte, expresó que las personas que se dedican a buscar personas, arriesgan a diario su vida, debido que no hay políticas públicas.
Afirmó que encontrar un punto positivo da esperanza de localizar a un ser querido, en las búsquedas independientes en las diversas zonas del estado.
“Sabemos que nos exponemos al ir a lugares que pueden ser peligrosos por su contexto; hacemos un análisis de riesgo sencillo y tratamos de cubrir las recomendaciones mínimas para mantenernos a salvo y no exponernos de forma innecesaria”.
“Para nosotras, ser buscadoras se convirtió en nuestro nuevo proyecto de vida. Hacerlo es saber que existe la luz posible para una persona y el descanso de no seguir con la incertidumbre a sus seres queridos”, aseveró.
En el informe, se detalló que los municipios con mayor tasa de desapariciones son
Celaya, Irapuato, Guanajuato, Salamanca y San Miguel de Allende.
Los integrantes de este colectivo hicieron exhortos al gobierno del estado, al gobierno federal, al Congreso del Estado y a la Fiscalía para que haya más recursos para las comisiones de búsqueda, priorizar la agenda de víctimas, incrementar la cantidad de investigadores, implementar planes para hacer investigaciones y privilegiar las búsquedas en vida.
Tras emitir el informe, los integrantes del colectivo colocaron las fotografías de los desaparecidos en un árbol, al que denominaron “de la esperanza”.