IRAPUATO, GTO.- Ante el hallazgo de fosas clandestinas con cuerpos en los municipios de Cortazar y Salvatierra, el Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, declaró que se trata de una situación preocupante, ya que entre las víctimas podría haber gente desaparecida de muchos años atrás.
En rueda de prensa virtual, expresó que esta situación, que es de tiempo y de responsabilidades, obliga a las autoridades seguir luchando, y a la gente, a denunciar los hechos delictivos ante las instancias correspondientes.
“Quizá esto se dé por la falta de confianza para denunciar, muchos crímenes van quedando en el olvido, en la impunidad”, dijo.
El Obispo de Irapuato expresó que debe haber una conciencia y no negar este tipo de actividades ilícitas que ocurren en el estado de Guanajuato.
Enrique Díaz mencionó que la primera condición para remediar un problema, es reconocer que existe.
“No podemos echar la culpa a las actuales autoridades, las autoridades actuales tienen responsabilidad y tenemos que seguir, negarlo no nos va a llegar a ningún lado”, expresó.
Enrique Díaz pidió el apoyo de ciudadanos y de autoridades gubernamentales para poder vencer los problemas de inseguridad.
En esta misma conferencia, el prelado urgió a los ciudadanos a acatar todas las medidas sanitarias de la pandemia por coronavirus, para romper la cadena de contagios y fallecimientos.