IRAPUATO, GTO; Rosy Ponce, la empleada de la Japami que fue despedida por meterse a las fuentes de la Plaza Principal, aseguró en una carta que subió a redes sociales, que su vida se ha convertido en un infierno ante la serie de ataques que ha recibido últimamente en diversas plataformas digitales.
La exfuncionaria aclaró que hace días se tomó la foto en dicha fuente en el marco del “Día Nacional del Pole Urbano”, pero que, desde esa fecha, por el hecho de haber posado en ese sitio, se ha convertido en una villana.
Afirmó que el pole urbano, es una actividad que deriva de la disciplina de pole dance, por lo que cientos de chicas comparten fotos en distintos puntos de la ciudad.
algunas más alto que otras, algunas más ágiles que otras, algunas en tubos, otras en escaleras, otras en plazas o en parques, pero siempre orgullosas de la fortaleza de su cuerpo.
Rosy Ponce afirmó en la carta que sus ojos se llenan de tristeza por el qué dirán, o por el qué le dirá a su hija, ya que se siente desprotegida, como bandera de un mal comportamiento y sin trabajo, por una foto que el morbo convirtió en un asunto viral.
La exfuncionaria de Japami expresó que, si ha ofendido a la sociedad, se disculpa, pero que no se arrepiente de practicar una disciplina tan difícil.
Añadió que no merece ser juzgada tan duramente ni su hija merece verla humillada porque los periódicos la exhiben y la dañan, y porque los que eran sus amigos la señalan y su realidad se ve terriblemente trastornada.