IRAPUATO, GTO.- El obispo de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, consideró como un flagelo la trata de personas, delito que se sigue presentando en la actualidad.
En la rueda de prensa dominical, el prelado informó que las persona no son mercancías ni objetos de placer.
“Josefina Vaquita fue una esclava, luego fue Santa, el Papa nos insiste no convertir a la persona en objeto de placer, en objeto sexual y menos en objeto para que otras personas vivan, desgraciadamente en nuestros ambientes se siguen dando estas situaciones, hay que seguir apoyando, procurando que no se siga tratando a las personas como objetos y mercancías”, dijo.
Enrique Díaz Díaz expresó que la trata de personas es complicada porque engloba a niños, niñas, mujeres y todo tipo de personas.
El Obispo de Irapuato expresó que queda un largo camino para irle dando un lugar a todas las mujeres.
Sobre el tema de los recursos para las guarderías en México, Enrique Díaz Díaz añadió que los apoyos económicos directos no son la mejor opción.