IRAPUATO, GTO.- El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, externó su preocupación por la gran cantidad de migrantes centroamericanos que pasan por la ciudad y que se mantienen debajo del puente de la Coca-Cola, para esperar el tren, pues afirmó que en su rostro se les ve el sufrimiento.
En conferencia de prensa, reveló que el sábado por la noche, se mostró sorprendido por los miles de migrantes que iban a bordo del tren por la zona de Paseo Irapuato con rumbo a la calle Guerrero.
“No creo que eran mil, creo que eran más, claro, ya estaba oscuro, no puedo afirmar cuántos eran, pero de Chinacos a Guerrero estaba lleno el tren y estando parado se veían las sombras de quienes iban y debajo del puente había más migrantes”, dijo.
El prelado comentó que el tema de la migración es difícil de solucionar, y pidió a las autoridades que no se quedan con las manos cruzadas.
Enrique Díaz solicitó a la ciudadanía que no sea indiferente con los migrantes, ya que están sufriendo en su ruta por llegar a la frontera norte.
El Obispo explicó que esta gran cantidad de migrantes ya la había visto en Palenque, Chiapas, pero no en la ciudad de Irapuato.