(Por: Daniel Gorosito)
Hace unos días, en el que fue el mensaje del fin de año, el Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA) el diplomático uruguayo Luis Almagro le envío una serie de mensajes al Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela que lidera Nicolás Maduro.
“Felicitamos a todos los procesos electorales realizados en 2015(…) especialmente a Venezuela”.
Pidió que “nadie distorsione la voz del pueblo” venezolano tras la victoria que obtuviera en las elecciones parlamentarias de diciembre. Le pidió en particular al país caribeño no distorsionar “su expresión más genuina que son los resultados electorales con estrategias de dudosa juridicidad, ni reclamando decisiones viciadas de parcialidad a organismos reconstituidos para la ocasión”.
“Que no se apele a la prepotencia tampoco, sino que haya diálogo y paz, y que el derecho a denunciar irregularidades no se sostenga en la parcialidad de órganos con nuevos integrantes de reconocida filiación político- partidaria” expresó tajantemente el Secretario General desde la sede en Washington, teniendo como destinatario el Gobierno de Nicolás Maduro.
Recordemos que en los últimos días del año pasado la oposición venezolana, vencedora en las elecciones parlamentarias y el oficialismo chavista, han mantenido un debate que días después de asumido el nuevo Parlamento el 5 de enero, aún no tiene fin sobre los poderes del mismo.
Luis Almagro que fuera Canciller del Gobierno que encabezara José Mujica en Uruguay y que llegara en el 2015 a la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos con el voto de la República Bolivariana de Venezuela, apuntó en su discurso que “nadie puede hablar por el pueblo, porque los pueblos hablan por sí mismos”.
“No podemos mantenernos neutrales ante la controversia, porque la democracia nos da libertad y la responsabilidad de hablar con coraje para representar valores y principios irrenunciables”.
“La justicia y la ética deben ser reglas que guíen la convivencia entre los países y, en cada país, el ejercicio de gobierno y oposición”, añadió Luis Almagro.
A su vez deseó que el vecino de Venezuela, la República de Colombia, consiga este 2016 la paz tras años de negociaciones y que “nunca más vivamos un conflicto armado en nuestro continente”.
Almagro se comprometió a que en este 2016, los grandes temas a redoblar esfuerzos desde la Secretaría General del organismo interamericano, serán la lucha contra la impunidad y por el respeto a los derechos humanos.
¡Hasta el próximo análisis…!
Lic. Washington Daniel Gorosito Pérez