IRAPUATO, GTO.- Pese a que ha disminuido, la incidencia delictiva en el Copal sigue haciendo presa de los habitantes.
Algunos habitantes dieron conocer que los asaltos ocurren a plena luz de día, sobre todo cuando las personas acuden a tomar el camión para dirigirse a la ciudad.
Vecinos se organizaron por un tiempo para poder reportar estos hechos delictivos, prevenirlos o en su caso para denunciarlo a las autoridades.
Sin embargo al paso de los días, la gente comenzó a perder el interés y dejaron de hacer los reportes.
La vigilancia en la zona es más frecuente pero no permanente, lo que permite que se cometan robos después de que pasan los elementos.
De acuerdo con los habitantes, las personas más afectadas son los jóvenes que acuden a las escuelas de la zona.
Además han detectado que quienes cometen los robos son habitantes de comunidades aledañas.
En algunos casos, señalaron que son personas que conocen de otros poblados, que llegan en vehículos, cometen atracos y escapar por los caminos de terracería.