IRAPUATO, GTO.- El Obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, afirmó que la quema del templo de Santiaguito fue un momento de mucho dolor y de tristeza, pero al mismo tiempo, de cercanía de muchas personas y de autoridades.
En su conferencia de prensa dominical, el prelado enfatizó que el templo es un lugar de referencia y una joya de Irapuato.
“Ya el lunes en la tarde se hacía una misa de desagravio en el patio de la casa de música, queremos seguir trabajando y luchando”, dijo.
El padre Sergio Montoya, informó que por estos hechos se interpuso una denuncia penal ante la Fiscalía General del Estado de Guanajuato, aunado a que un equipo especial está trabajando en las técnicas de intervención en el lugar.
Añadió que lo más urgente es la puerta que se quemó y la principal, ante los daños que presentan.
“Se está haciendo un proyecto para que se pueda presentar ante el INAH, lo más urgente, de la parte estructural es la puerta, nos deja vulnerables, más de lo que ya éramos”, añadió.
El Obispo comentó que se desconoce quién fue el responsable de haber realizado la quema en el templo el lunes pasado, por lo que las investigaciones tienen que ser agotadas por la Fiscalía General de Guanajuato.