IRAPUATO, GTO.- En un encuentro con catequistas, el obispo de la Diócesis de Irapuato, Enrique Díaz Díaz, los exhortó a ser signo de paciencia, maestras de oración y portadoras de alegría ante los tiempos complejos que se viven.
En su intervención, Díaz Díaz subrayó que la esperanza no debe perderse, incluso cuando prevalecen las dificultades y los problemas.
“Vemos tantas y tantas cosas que parece que van al revés, tenemos que tener en cuenta que la esperanza no defrauda”.
“Por eso decimos que el catequista es sembrador de esperanza, porque el mismo Jesús es sembrador de esperanza”, señaló.
El prelado reiteró que en medio de un mundo marcado por problemas, los catequistas están llamados a convertirse en peregrinos de la esperanza y sembradores de la esperanza para reforzar su misión pastoral y su compromiso con la comunidad.